martes, 15 de septiembre de 2009

Abraham Y El Dios Cananeo

El (en hebreo אֵל) es una palabra semítica del noroeste, que tradicionalmente se traduce como ‘dios’ o ‘deidad’. Algunas veces, dependiendo del contexto, permanece sin traducción (quedando simplemente El). En la mitología cananea era la deidad principal y era llamado «padre de todos los dioses». En los hallazgos arqueológicos siempre es encontrado al frente de las demás deidades, y está considerado como el más antiguo de los dioses.

En todo el Levante mediterráneo era denominado El o Il, siendo el dios supremo, padre de la raza humana y de todas las criaturas. En las tablas de Ugarit figura también como el esposo de la diosa Asera (la madre de todos los dioses, la esposa celestial).

El dios El se encontró en las ruinas de la Biblioteca Real de la civilización Ebla —en el yacimiento arqueológico de Tell Mardikh (Siria), que data del 2300 a. C.—. En algún momento de la historia pudo haber sido un dios del desierto, pues un mito dice que tuvo dos esposas y que con ellas y sus hijos construyó un santuario en el desierto.

El ha sido el padre de muchos dioses —setenta en total— los más importantes fueron He, Hadad, Yam y Mot, los cuales tienen atributos similares a los dioses Zeus, Poseidón o Ofión, Hades o Tánatos respectivamente, los antiguo mitógrafos griegos identificaron a El con Crono, el rey de los Titanes.

Por lo general, El se representa como un toro, con o sin alas. También lo llamaban Eloáh, Eláh, que en árabe se convirtió en Allah).

El dios El preside sobre el monte G'r kvsi, que a veces se traduce como Khurshan-Zur-Kas (Kjúrshan zur kas),

La Familia de Hashem
La Biblia encierra muchas sorpresas. Su estudio detallado revela circunstancias que chocan frontalmente con los dogmas establecidos con el paso de los siglos. Una de ellas se refiere a las creencias originales del pueblo judío. En un principio, aunque pocos lo sepan, Israel aceptaba la existencia de otros dioses, pero sometidos a la autoridad de Yahvé. Esa concepción coincidía, a grandes rasgos, con la que tenían los cananeos, el pueblo que habitaba gran parte de las tierras que luego serían conquistadas por lsrael La principal diferencia entre ambos consistía en que, para los primeros, ese dios principal era Yahvé, mientras que, para los segundos, era Baal.

El dios El es de origen babilónico o mesopotámico en la personificación de Anu, para los pueblos cananeos era la deidad principal, el rey, creador de todas las cosas, el juez que dictaba lo que debían hacer tanto los hombres como los dioses, tuvo dos esposas Asera y Anat hermana de Hadad (Baal Raman (el trueno, señor del trueno), esta última, era llamada "la amante de los dioses", ambas eran diosas de la fertilidad.

El es el padre de la «divina familia» y presidente de la asamblea de los dioses en el Monte de la Reunión. Su equivalente en hebreo es har mo'ed, de donde sale la palabra griega armagedón. Es llamado «toro» por su fortaleza y potencia creativa, es el «Anciano de Días», la «Roca de las Edades», está representado en una roca en Ras Shara.

En los mitos es clasificado como Bny Bnwt que significa ‘creador de todas las cosas creadas’, aunque algunos lo traducen como ‘dador de potencia’. En las dos inscripciones halladas en Ras Shamra, El es retratado como un dios frío y distante, «en el flujo de los [dos] ríos», posiblemente el Edén, de donde un río fluía para formar a los ríos Tigris, Éufrates, Gihón y Pisón.

Aparte de ser llamado «el creador», también era llamado «el bondadoso», «el compasivo» (títulos que aparecen incluso en la Biblia. Sólo la adoración de esta deidad (o su nombre) nunca fue estigmatizada en la Biblia ni por los patriarcas. De hecho Abraham dio los diezmos a un sacerdote de «El, el Altísimo», llamado Melquisedec. Su esposa primaria fue Ashera o Asera, la madre de los dioses, representada en los santuarios cananitas con árboles ornamentados.

En Canaán el rey era nombrado «siervo de El» (similar al nombre del rey israelita David «El siervo de Dios». Esto describía el estatus de los reyes antiguos como ejecutores de la voluntad divina. Este título era visto como un privilegio y como una carga.

La supervivencia de la mitología cananea en el pueblo monoteísta de Israel, se puede encontrar en muchas partes de la Biblia, por ejemplo la concepción de Dios como presidente en la "corte de los dioses" o "la divina asamblea" (Bene'El), también es para referirse a la divina familia de El, en Deuteronomio 32, empieza con Israel en sus "lapsus" de fe y termina con el aserto de la destrucción de sus enemigos, la historia de Israel es expuesta como originando nombrando a su Dios Yahweh por el "altísimo" en la asamblea de «los hijos de El» (dígase en la septuaginta de los "Hijos de Israel", aunque la fecha de este poema es de disputa, la condenación de Israel por su apostasía no lo es, el cual data de 900 a. C. en Deuteronomio 32:8 representa la primera etapa de los israelitas en su adaptación del concepto de Dios al mando de la "corte divina" de la mitología cananea, la concepción de Dios como simplemente «el primero» en la «divina asamblea» no podría permanecer sin contención, despareciendo la corte completa en esta religión.

En los tiempos de Palestina, «los hijos de El» significaba ‘los dueños de los ganados, adoradores del dios-toro El’, y «las hijas de Adán» significaría ‘las mujeres de Adama (suelo, tierra)’ Adama era una diosa de la agricultura, en la Biblia simboliza a la tierra de donde Adán fue tomado, las hijas de Adama eran notorias por sus orgías (prostitución ritual). En aquellos tiempos era común que hubiesen sacerdotisas sexuales, que sirviesen en los templos, es posible que de aquí venga la historia de El seduciendo a dos mujeres mortales, y éstas dándole hijos semidivinos, llamados Shalem (perfecto), y Shahar (alba), que posee alas (según el salmo 139:9), y su hijo fue el Ángel caído Helel (según Isaías 14:12).

La unión entre los dioses y mortales se encuentra en todas las mitologías del mundo: el dios Yahveh sólo tiene a Jesucristo, producto de su unión con una mortal (la virgen María); el dios Alá no posee hijos. En cambio El —de donde provienen ambos dioses— llegó a tener una descendencia de más de 70 deidades, por así decirlo antiguamente los habitantes de la tierra creían que la Realeza eran Hijos de Dios o de los dioses, estas creencias se encuentran desde el Mediterráneo y todo el Oeste de Asia, sin contar las demás partes del mundo, desde el momento en que el judaísmo hizo a un lado todas las deidades dejando solo a su Dios trascendental, y la transformación de este El(Ein)-Eloheinu, el cual nunca se casó con ninguna deidad, ni mortal, por tanto nunca tuvo hijos, llamarse hijo de Dios era un anatema, así el rabino Shimon ben Yohai se vio obligado a maldecir a todo aquel que pretendiera leer en la Torá y otros libros, como los "Hijos de Dios" en el sentido ugarítico. Esta interpretación había permanecido inmutable hasta su época (el siglo II), y solamente permitió el sentido bene elohim, que significara ‘dios’ y ‘juez’. De ahí la idea judía de que Elohim no significa ‘dioses’, la teoría de Ben Yojai era que un magistrado de un caso era poseído por el Espíritu de Dios (salmo 82:6)

La Ex-Familia de Hashem
Pero Baal no era sino el hijo de otro dios llamado El, a quien sustituyó en el trono. Curiosamente, Hashem manifiesta en la Escritura numerosas veces, su odio visceral hacia Baal, pero nunca hacia su progenitor. Sorprende que un dios celoso como era Hashem permitiera después a los judíos utilizar esa misma palabra, «El», para designar a su persona, tal y como podemos observar en numerosos pasajes de la Biblia.

¿Por qué esa excepción con un dios de sus enemigos los cananeos? ¿Acaso se trataba de un dios diferente? Esas contradicciones han llevado a algunos exégetas a insinuar que ese dios El de los cananeos y su homónimo hebreo —también conocido como Yahvé— podrían ser en realidad el mismo dios. Hay un texto clave en el capítulo 14 del Génesis que parece confirmar tal hipótesis. Allí encontramos a dos personajes, uno judío —Abraham— y otro cananeo —Melquisedec—, que se saludan mutuamente invocando ambos al mismo dios: El-Elyón, nombre compuesto con el del dios cananeo y el superlativo «Elyón» (el Altísimo). El que tanto Melquisedec como Abraham utilizasen en su saludo el mismo nombre, no deja opción a ninguna otra explicación: ambos adoraban al mismo dios. Yahvé no era sino el nombre con el que los judíos conocerían al antiguo dios de las cananeos, y a partir de ese momento el título de «el Altísimo», utilizado hasta entonces sólo por los cananeos, pasaría también a ser empleado por los israelitas para referirse a su dios.

Y si ambos dioses eran en realidad el mismo, las «leyendas» de los textos cananeos pueden también aplicarse a Yahvé. Así, por ejemplo, se dice que de los amores de ese dios con distintas mujeres nacieron varios hijos. Uno de ellos, llamado Sahar (aurora) tiene una relación directa con la historia de nuestro personaje, pues en el texto de Isaías Lucifer es llamado Helel ben Sahar por el propio Yahvé, es decir «Lucero hijo de la Aurora». Y aquí nos encontramos con la paradoja de que —en base a ese título, y según la mitología cananea— Lucifer podría ser descendiente directo, aunque no reconocido, de Hashem.

Antes de rechazar de plano tan heterodoxa idea deberíamos regresar al texto de Isaías. Allí comprobaremos cómo Lucifer pretendió «escalar el cielo y colocar su trono por encima de las estrellas de El». Se dice que en la Biblia, las estrellas simbolizan los miembros de la corte de Yahvé. Pero el texto menciona algo más: Lucifer ambicionaba «sentarse en la Montaña del Encuentro, en los confines del Safón». «Safón», en hebreo, significa «norte», pero para los cananeos, el Safón era precisamente la montaña donde moraba la divinidad. No lejos de ahí se encontraba «la Montaña del Encuentro», lugar donde los dioses tenían sus asambleas. La idea es casi universal: los griegos hablaban del monte Olimpo, en cuyo pico más alto vivía Zeus, y en su morada convocaba las reuniones con otros dioses; los hindúes mencionan el monte Meru, en cuya cumbre se hallaría la ciudad dorada de Brahma, punto de encuentro de dioses. Tales ideas, lejos de ser ajenas al pensamiento hebreo, se encuentran ratificadas en multitud de puntos de la Escritura, supervivientes a posteriores «retoques» más acordes con la ortodoxia monoteísta de los últimos siglos del judaísmo. Pero, ¿qué ocurría en la privacidad de las reuniones de Yahvé con los otros dioses?

Aunque el Libro de los Salmos es bien conocido, casi nunca se repara en el revelador contenido del número 82. Allí se habla de un Yahvé orgulloso, que ostenta de nuevo la jefatura entre los dioses, dispuesto a poner las cosas en su sitio. Dice así el texto:

«Elohim se yergue en la asamblea de El, en medio de los dioses juzga: ¿Hasta cuándo juzgaréis injustamente y guardaréis consideración a los malvados? Haced justicia al humilde y al huérfano, vindicad al infeliz y al pobre. Rescatad al humilde y al indigente,- de manos de malvados liberadle... Yo me dije: ¡Dioses sois, e hijos de Elyón todos vosotros, sin embargo, moriréis como hombres, y como cualquiera de los príncipes, caeréis».

Estrella Matutina

¡Dioses sois, e hijos, de Elyón! El texto no deja lugar a dudas: los dioses juzgados, aquéllos a quien Yahvé había confiado distintas funciones, son sus propios hijos y el texto pertenece a la Biblia. Ahora bien, ¿qué funciones realizaban estos hijos de Elyón? La respuesta nos la da el Deutemnomio:

«Cuando Elyón repartió las naciones, cuando distribuyó a los hijos de Adán, fijó las Íronteras de los pueblos según el número de los Sene'El [los hijos del dios El], mas la porción de Yahvé fue su pueblo» (Deut. 32, 8-9).

Es decir, cuando Yahvé comenzó tener descendencia, dividió su reino entre sus hijos, reservado para sí una parte del territorio: el quf primero ocuparían los cananeos y luego Israel. Tal pudo ser el origen de muchas monarquías de aquella zona. Pero con el tiempo esos reyes dejaron de ser leales y cuestionaron la supremacía de Yahvé. Incluso su propío hijo Baal llegaría a arrebatarle el trono. Esa fue la razón por la que Yahvé planeó la invasión del territorio cananeo por el pueblo de Abraham: necesitaba que un nuevo pueblo fiel ocupase su antiguo territorio, le rindiera culto y le erigiera de nuevo en dios del lugar. Con ello recuperaría además del trono en aquella zona, el título que había perdido de «Dios de )os dioses» (Jos. 22, 22). En cuanto a esos otros dioses, Yahvé no dudó ni por un momento en acabar con ellos cuando lo creyó necesario. Eso sí, les dedicó bellas palabras que recórdaran su antigua magnificencia. Así, por ejemplo, ocurrió con el rey de Tiro:

«Tú eras sello de perfección —evocaba Yahvé— lleno de sabiduría y de acabada belleza; en el Edén, jardín de Elohim, habitabas. Tú eras un querubín consagrado como protector. Yo te había establecido; estabas en la Santa Montaña de Elohim... hasta que se descubrió en ti la iniquidad. Se enegrió tu corazón por tu belleza, echaste a perder tu sabiduría por tu esplendor. Por tierra te he derribado... te he arrojado de la Montaña de Elohim, y te he destruido, ¡oh, querubín protector!» (Ez. 28).

"Y respondió Abraham al rey de Sodoma: He alzado mi mano a Hashem

Dios Altísimo, creador de los cielos y de la tierra." [Génesis 14:22]

Por El Agente Megatrón

Muchos desconocen que entre los eruditos existe conflictos por este texto bíblico. ¿Sabe porqué los eruditos debaten sobre este texto? Por que en los escritos hebreos el nombre Jehová no aparece por estos lugares. ¿Qué les parece? En el lugar donde los eruditos traducen "Dios Altísimo" los manuscritos antiguos escriben El Elyon. El escándalo de todo esto radica en que El Elyon era uno de los dioses del panteón politeísta de la religión cananea. Vemos nuevamente como el clero no le suple esta información a los feligreses. ¿Porqué será? Desvelar esa información pondría de manifiesto que los traductores del Vaticano han cometido fraude y encubrimiento en la traducción de la Biblia y que han alterado el contexto histórico de los hechos. ¿Qué hace una deidad pagana en los escritos de la Biblia? ¿Qué rayos hace Abraham invocando a una deidad cananea cuando se supone que él era monoteísta? ¿Oculta algo el Vaticano? Sí, de hecho ellos ocultan muchas cosas. En el nombre del dios pagano cananeo El Elyon el título "El" designa "poderoso," "verdadero." Elyon guarda relación con el término "de las alturas." Por el contexto de la gramática El Elyon lo que designa es "el poderoso que ha descendido de las alturas." Nuevamente vemos como los antiguos pueblos le atribuían características extraterrestres a sus dioses pues si Elyon descendía de las alturas es obvio que se alude a que su morada se encuentra más allá de la atmósfera planetaria; y bajo el contexto de la terminología y por definición propia de la palabra cualquier forma de vida que more fuera de nuestra atmósfera planetaria es extraterrestre. Le aconsejamos a los lectores que tome cualquier diccionario y busque la definición de extraterrestre. Los pueblos antiguos de la región veneraban a sus dioses de alto rango por el uso del título "El" para diferenciarlos de los dioses de bajo rango.

El Elyon aparece como uno de los dioses de alto rango en el panteón cananeo y en las tablas arqueológicas donde aparecen elogios e invocaciones reconociéndolo como el dios creador de los cielos, lo que lo diferenciaba de los dioses menores de la religión cananea. Revelar que el patriarca Abraham invocó al dios de la religión politeísta El Elyon es tirar por el suelo la pretensión de que el patriarca Abraham era monoteísta y pone de manifiesto que el Vaticano ha ido tan lejos y ha engañado a los pueblos de la Tierra falsificando las escrituras a su propio antojo y eliminaron los nombres de los dioses de religiones politeístas para encubrir estas verdades históricas de lo cual hay prueba escriturar y arqueológica. ¿Le ha explicado el clero esto de esta forma tan clara y porqué los pueblos antiguos creían de esta manera? Ya sabemos que la respuesta es NO. Este tipo de conducta revela un acto de conspiración bien elaborado que debe ser rechazado por todos los amantes de la verdad.

El Shaddai Dios De La Montaña

¿Qué le han enseñado sobre la terminología Shaddai? ¿No es cierto que le han comentado que El Shaddai significa "Dios todopoderoso"? Demostraremos que existe una infinidad de información que el clero ha ocultado a lo largo de su historia. ¿Porqué será? Ellos no desean que las masas despierten y conozcan como se "moldeó" el esquema y las enseñanzas generales de la Iglesia Histórica. Demostraremos que la voluntad de estas personas es que ustedes no adquieran un vasto conocimiento por que muchos cuestionarían el origen de estos "arreglos." ¿Cuántas veces se han realizado estudios cautelosos sobre el significado que encierran estas palabras? ¿Cuántas veces le han explicado el verdadero significado del título "EL" y de la palabra Shaddai?

El Shaddai aparece 40/41 veces en el Antiguo Testamento como título para la deidad o deidades. ¿Deidades? Algunos dirán; "pero Shaddai es un título para Dios." Bueno, eso es lo que el clero desea inculcarle en sus mentes. Shaddai aparece aproximadamente 30 veces en el libro de Job. Nuevamente algunos quedarán estupefactos cuando se enteren de lo siguiente. Cualquier rabino profesional (maestro experto del antiguo hebreo) y todo erudito profesional está deacuerdo en que Shaddai es una palabra plural. ¡Sorpresa! Cuando se habla de Shaddai se alude a "varios" (pluralismo). Pero el contexto se puede utilizar para describir ciertos artibutos y se puede emplear a un sujeto. La palabra designa pluralidad de personas. ¡Qué escándalo para la Iglesia! ¡Como le han negado estas verdades ocultas dejando a las masas en la ignorancia.

Un análisis profesional y cauteloso revela que Shaddai es una palabra compuesta. Algo que el clero tampoco le ha revelado. Shaddai guarda relación con la raíz sadu que significa montaña. El sufijo ai en el nombre Shaddai significa "de la." De modo que Shaddai lo que significa es "de la montaña." En los textos ugaríticos que es una de las fuentes de mayor peso sobre la escritura cananea el sufijo "ai" siempre significa "de la" lo que esclarece y elimina dudas en cuanto al significado real de la terminología de esta palabra. El título El se utilizaba para designar a los dioses de alto rango pues se puede traducir "poderoso, verdadero." De modo que estas palabras significan "dioses poderosos de la montaña" puesto que Shaddai es plural. Debido a que este título era usado por distintas religiones de distintos pueblos más antiguos que el pueblo de Israel, los teólogos expresan que a Jehová no se le debe designar con el título El. Pero el problema es que existen textos de la Biblia que denominan a Jehová con éste título lo que indica que Israel absorbió costumbres de otros países. ¿Están los teólogos encaminándose contra lo que su propio libro sagrado revela por que afecta lo que ellos han "moldeado" durante todos estos siglos?

Vemos que la creencia en el dios de la montaña estaba presente en las mentes de los pueblos antiguos mesopotámicos y palestinos. Uno de los problemas teológicos es que Israel adquirió estas costumbres de religiones politeístas. Abraham salió de Ur de los caldeos. La Biblia menciona esto en Génesis 11:31: "Y tomó Taré a Abraham su hijo, y a Lot hijo de Harán, hijo de su hijo, y a Sarai su nuera, mujer de Abram su hijo, y salió de Ur de los caldeos." Abraham trajo estas costumbres de la religión de Ur de Caldea, y la religión de Caldea era politeísta.

Para los hindúes, algunos dioses moraban en una montaña sagrada al norte, el monte Meru. Ellos creían que los dioses descendieron de lo alto (Espacio Exterior, extraterrestres) y se ubicaron en esta montaña. Lo mismo ocurre con la historia antigua de los griegos, ellos creían que los dioses moraban en el monte Olimpo. De modo que vemos como las religiones politeístas de la antigüedad creían que los dioses moraban en una montaña sagrada. El hecho de que tanto Moisés como Abraham subían a la montaña para hablar con Jehová refleja que ambos trajeron este concepto de las religiones politeístas. La creencia de Abraham en el dios de la montaña se hace vigente cuando leemos en la Biblia: "Luego se pasó de allí a un MONTE al oriente de bethel, y plantó su tienda, teniendo bethel al occidente y Hai al oriente, y edificó allí altar a Jehová." [Génesis 12:8] Si Abraham realizó el esfuerzo en subir al monte es por que estaba convencido de la realidad de que el "dios de la montaña" o los "dioses de la montaña" moraban en ese lugar. De lo contrario no hubiera tomado la molestia en subir al monte, una ardua tarea y bastante cansable. La persistencia de subir al monte prevaleció sobre el cansancio y el sufrimiento que pudo haber experimentado Abraham. Esto revela su fiel creencia en el "dios de la montaña" concepto que trajo de Ur de los Caldeos como la propia Biblia expresa. ¿Acaso no podía Abraham experimentar el contacto con Dios desde el valle? ¿Porqué se mantenía Abraham cerca del monte? Por que buscaba un contacto con Shaddai, pero Shaddai es plural y alude a "muchos."

Shaddai proviene a la vez de la raíz shad y alude al pecho femenino (senos), la diferencia lo hace el sonido fonético de las vocales. Si se utiliza en este concepto entonces Shaddai representa un cuadro feminista donde la deidad sirve de sostén pues de sus "senos" proviene el alimento natural importante para el sostén de la vida. De modo que en este concepto Shaddai se visualiza como sostén y protección. Por esta razón cuando los israelitas llegaron a Canaán se ubicaron en dos montes, Gerizim y Ebal. "La mitad de ellos estaba hacia el monte Gerizim, y la otra mitad hacia el monte Ebal..." [Josué 8:33b] El verso 30 expresa que en este monte Josué edificó un altar. Este monte sirvió como lugar de escena donde una mitad del pueblo se encontraba en el monte Gerizim y la otra mitad sobre el monte Ebal, símbolo de sostén. De la misma manera en que una madre protege a sus hijos y le suministra alimento a través de sus senos, Shaddai que alude a shad significa en este contexto que serviría de protección para Israel. La relación existente entre montaña y senos es evidente pues al observar una montaña desde el horizonte ésta se eleva sobre los valles teniendo un parecido a las protuberancias del seno femenino. Recordemos que Shaddai aparece 30 veces en el libro de Job. Recordemos de igual forma que uno de los amigos de Job era místico por lo que se visualiza a Dios con distintos atributos que son contrarios a los dogmas impuestos por el clero. "Y al pasar un espíritu por delante de mí, hizo que se erizara el pelo de cuerpo. Paroce delante de mí un fantasma cuyo rostro yo no conocí" [Job 4:16-17] Hable sobre estos temas hoy día y verá como el clero intenta despojarlo de esas creencias. Sin embargo, nuevamente la Biblia trae a la luz pública estos temas. En el comentario de la Biblia de Estudio Reina Valera 1960 del editorial Caribe página 546 los teólogos declaran: "Elifaz era el místico... Elifaz hizo su apelación a Job basándose en una visión nocturna. Considera su experiencia mística adecuada como para acusar de pecado a Job." ¿Porqué los teólogos no condenan estas experiencias si al ser místicas van en contra de los dogmas de la Iglesia? No hace falta realizar más comentarios al respecto.

Más Pruebas

"Y aparecí a Abraham, a Isaac, y a Jacob como Dios Omnipotente (El Shaddai)

mas en mi nombre Jehová NO ME DI A CONOCER." [Éxodo 6:3]

Si traducimos el texto en su forma natural el mismo declara: "Y aparecí a Abraham, a Isaac, y a Jacob como Dios de la montaña, mas en mi nombre ( el nombre Jehová, Yahvé) no me di a conocer." La declaración de la escritura es clara y revela que el término Jehová NO ERA CONOCIDO en la época patriarcal, los días en que vivió Abraham, Isaac, y Jacob. De modo que cada vez que los traductores de la Biblia insertan el tetragrámaton (Jehová) en el libro de Génesis están alterando las escrituras. De esta manera se les hace creer a los feligreses que Abraham invocó el nombre Jehová, pero Éxodo 6:3 es BIEN CLARO y reafirma que NINGUNO de los patriarcas conocía a Dios por el término Jehová. ¿No le hemos dicho que ellos han falsificado la Biblia? ¿Cree usted ahora? La propia revelación de la escritura los expone como traductores fraudulentos.

Ahora bien, tome cualquier Biblia y lea el primer verso de Génesis capítulo 2. Lea el primer verso del capítulo 3 y así sucesivamente. Encontrará que en todos los capítulos mencionados aparece el término Jehová. ¿Pero no dice claramente Éxodo 6:3 que NINGUNO de los patriarcas conocía a Dios por el nombre Jehová? ¿Entonces porqué aparece el tetragrámaton (Jehová) en el libro de Génesis si el libro antecede la época patriarcal? Por que los escribas y los traductores del Vaticano acomodaron el tetragrámaton en esos lugares para hacerles creer a las masas que en el libro de Génesis se habla de una sola deidad cuando la realidad es que se habla de muchas deidades de distintos pueblos y de distintas religiones; algunas de éstas pertenecientes al panteón politeísta de los cananeos y de los jebuseos, como es el caso de El Elyon y Shaddai y otras deidades pertenecientes a Ur de los caldeos.

Lea lo que los propios teólogos escriben al respecto: "Este versículo presenta algunas DIFICULTADES porque en Génesis 12:8 se dice que cuando Abraham llegó a la región de bethel edificó allí altar de Jehová." [Biblia de Estudio Reina Valera editorial Caribe edición 1960, página 73] ¿Cuál es la dificultad a la que los teólogos hacen referencia? Lo que mencionamos en el párrafo anterior en relación sobre que el nombre de Jehová no se conocía en la época de Abraham, Isaac, y de Jacob. Los teólogos continúan hablando sobre ésta DIFICULTAD pues en la misma página y en el mismo párrafo ellos escriben: "El nombre Jehová es la designación de Yahvé, el nombre personal del Dios de Israel en el AT." Si el nombre Jehová se designó ya en Génesis 12:8, luego 6:3 significa que Yahvé adquirió NUEVO SENTIDO después de la revelación de Dios a Moisés." Los escolásticos quieren que creamos que aunque el nombre Yahvé no había sido revelado en los tiempos de Abraham, Isaac, y de Jacob como declara Éxodo 6:3; que hagamos caso omiso de lo que el texto expone y pretendamos que Abraham sí conocía a Dios por ese nombre cuando Éxodo 6:3 expresa claramente que Dios NO ERA CONOCIDO por el nombre Yahvé (Jehová). La conducta de los teólogos es algo parecido a lo que describo a continuación. Es como si ellos dijeran; "bla, no hagan caso de lo que dice Éxodo 6:3. Mejor crean lo que nosotros le decimos." El atrevimiento de estos hombres por tratar de encubrir lo que no les agrada es algo realmente bárbaro. Cuando se encuentran ante problemas que presentan "ALGUNAS DIFICULTADES" como ellos mismos escriben en la página 73 de su comentario ellos hacen todo lo posible por opacar la información que la Biblia documenta. ¿No son ellos los "defensores de la Biblia"? Solo una palabra puede describir su conducta, pamplinas.

Los propios teólogos quedan atrapados ante sus propias confesiones pues en la página 73 de la Biblia de Estudio Reina Valera editorial Caribe escriben: "Sin embargo si 6:3 se ha de interpretar como el origen del nombre Yahvé, entonces su empleo anterior es UNA INSERCIÓN del nombre del Dios de Israel en las crónicas patriarcales anteriores." ¡Tremendo! Ellos mismos lo ADMITEN. Note que los teólogos han escrito: "entonces su EMPLEO ANTERIOR es una inserción." ¿Es qué? "UNA INSERCIÓN." Los teólogos han "metido la pata" pues han ADMITIDO públicamente que los escribas han añadido de forma FRAUDULENTA el nombre Jehová por todo el libro de Génesis cuando el mismo NO APARECE en los manuscritos hebreos antiguos ni sigue la cronología de los eventos que presenta Éxodo 6:3. ¿No le dijimos al principio que ellos han falsificado la Biblia? La propia admisión que estos teólogos han dejado por escrito los ha atrapado. La luz alumbra aún en medio de la oscuridad, iluminación ha sido manifestada.

Al frente del panteón cananita había una deidad suprema llamada EL; un término que en hebreo bíblico era genérico para «deidad», derivada de la palabra acadia Ilu, que literalmente significa «El Elevado o Noble». Pero en los relatos cananitas sobre los dioses y los hombres, EL era el nombre personal de una deidad concreta, que representabala autoridad máxima en todos los asuntos, divinos o humanos. Una estela encontrada en Palestina muestra a EL sentado en su trono mientras una deidad más joven le sirve una bebida, probablemente uno de sus numerosos hijos. EL usa un tocado cónico con cuernos, símbolo que caracterizaa los dioses en todo el antiguo Cercano Oriente; la escena está dominada por un globo alado omnipresente, el emblema del Planeta de los Dioses.

En tiempos pasados, EL era la principal deidad de los Cielos y de la Tierra. Pero cuando tuvieron lugar los sucesos relatados en las tablillas, EL vivía en un retiro relativo, apartado de los hechos cotidianos. Su residencia estaba «en las montañas», en «las dos fuentes de las aguas». «Allí se sentaba en su pabellón, recibiendo a sus emisarios, manteniendo consejos con los dioses y tratando de resolver periódicas disputas entre los dioses más jóvenes». Muchos de ellos eran sus propios hijos; algunos textos sugieren que EL pudo haber tenido 70. De ellos, 30 los tuvo con su consorte oficial Ashera; los otros, con varias de sus concubinas y también con algunas humanas. Un escrito poético cuenta cómo dos mujeres vieron a EL desnudo mientras paseaban por la playa; quedaron encantadas por el tamaño de su pene y terminaron cada una de ellas dándole un hijo.

Los descendientes principales de EL fueron tres hijos y una hija: los dioses Yam («Océano, Mar»), Ba'al («Señor») y Mot («El Golpeador, Aniquilador»), y la diosa Anat («Ella, la que responde»). Sus nombres y relaciones son fácilmente comparables con los dioses griegos Poseidón (Dios de los Mares), Zeus (Señor de los Dioses) y Hades (Dios del Mundo Más Bajo). Ba'al, como Zeus, estaba siempre armado con un misil relampagueante, y era el toro su símbolo de culto. Cuando Zeus combatió a Tifón, fue su hija Atenea, Diosa de la Guerra y el Amor, la única que le acompañó; y en los relatos egipcios, Isis fue la única que se quedó con su hermano-esposo Osiris. Lo mismo ocurrió cuando Ba'al combatió a sus dos hermanos; su hermana-amante Anat llegó en su ayuda. Como Atenea, ella era por una parte «La Doncella», a menudo ostentando su belleza desnuda; y por otra la Diosa de la Guerra, con el león como el símbolo de su bravura. El Antiguo Testamento la llama Ashtoret.

Los vínculos con la memoria y creencias prehistóricas egipcias no eran menos obvios que con los griegos. Osiris fue resucitado por Isis después de que ella encontrara sus restos en la ciudad cananita de Biblos. Del mismo modo, Ba'al fue devuelto a la vida por Anat después deque fuera golpeado por Mot. Seth, el adversario de Osiris, era a veces llamado en los escritos egipcios «Seth de Safón»; Ba'al adquirió el título de «Señor de Safón». Los monumentos egipcios del Nuevo Reino a menudo describían a los dioses cananitas como deidades egipcias, llamándolas Min, Reshef y Anthat. Encontramos así los mismos relatos refiriéndose a los mismos dioses, pero con nombres diferentes, en todo el mundo antiguo.

Los estudios señalan que todos estos relatos son ecos y no versiones verdaderas, de los muchos más antiguos y originales relatos sumerios. Los relatos están repletos de episodios, detalles, epítetos y enseñanzas que también conforman el Antiguo Testamento, confirmando un escenario común (Gran Canaán), y las tradiciones y versiones originales comunes.


http://teologia5nivel.blogspot.com/2009/03/la-evolucion-de-jeova.html


http://teologia5nivel.blogspot.com/2009/05/la-evolucion-de-hashem-henoteismo.html


http://www.urantia.org/spanish/es_docs/doc096.html

1 comentario:

Aion dijo...

En este texto se dice que Baal es hijo de El pero Baal no es hijo de El sino de Dagon.